dimarts, 16 de febrer del 2010

CHRISTIAN SCOTT (Nova Jazz Cava, Terrassa, 13/2/2010)

Christian Scott, trompeta
Matthew Stevens, guitarra eléctrica
Milton Fletcher, piano
Kris Funn, contrabajo
Jamire Williams, batería


Christian Scott (Imma Casanellas)
Aperitivo de lujo en un escenario ideal. Primera visita a Terrassa del joven trompetista, compositor y productor Christian Scott, y noche de las que hacen afición, con el 29º Festival a las puertas. Efectivamente, sólo entrar en la sala la sensación fue esa: casi lleno en el patio de butacas y ambiente de las grandes ocasiones. El aura del Festival ya se deja sentir por todas partes,  con ese cartel que encabezan, Roy Hargrove, Charlie Haden Quartet West y Abdullah Ibrahim.

El grupo al completo (Imma Casanellas)

Jamire Williams (Imma Casanellas)






















Para empezar el trompetista de Nueva Orleans ofreció un set de fusión urbana, con el hip-hop por bandera y una energía que quiso contagiar a la relajada audiencia, inicialmente, bastante indiferente. “Make noise, that’s a relationship!”, iba diciendo. Pero nada de eso estaba el respetable dispuesto a darle. Aplausos, eso sí, que no falten.
Mientras, Christian Scott iba dejando muestras de su exuberante técnica. Cuando se calzó la sordina Harmon, que él mismo ha diseñado al igual que su trompeta, no dejó a nadie indiferente. Fue un aviso. Un toque de sorprendente calidad, sin maltrato auditivo y de un extremo al otro del pentagrama. En particular, los “pianos” fueron de gran mérito.
Pero faltaba algo para la conexión con el público y, en el segundo set, llegó. El bop se hizo presente y ahí, el más escéptico, cayó de rodillas. “Eye of The Hurricane” del maestro Herbie Hancock fue la que encendió la mecha, junto a la exquisita balada con la que abrió este set. De ahí al final, ofreció piezas de trabajos anteriores como “Live at Newport” o “Anthem”, algunas de ellas con un fino toque de jazz-rock que acabó por redondear una actuación brillante y, en cierto modo, conmovedora. No se presentan tantas ocasiones en las que uno se va para casa pensando en lo que acaba de presenciar.

Gran trabajo del baterista Jamire Williams y buenísima compenetración de Matt Stevens a la guitarra eléctrica, los dos escuderos que han estado presentes en la meteórica ascensión de Christian Scott, en los últimos 4 años.  Al final estaban todos como unas pascuas y el público haciendo cola para comprar el último CD, “Yesterday You Said Tomorrow”.